Las GALLINAS… Es como el amor a primera vista o el jengibre
escarchado. TE VA O NO TE VA.
Y si te va, desde hace tiempo piensas y piensas en
la manera de poder tener tus dos gallinas, pero todo se te pone de través: las
vacaciones y los viajes, el espacio necesario, el PERRO DEL
VECINO, tu marido.
Y no, realmente NO es posible tener gallinas en una
terraza, pero si tienes un terrenito…
En fin, un terrenito un poco grande, porque una
gallina es la MÁQUINA de escarbar por excelencia y nada de lo que te digan podrá prepararte
para semejante fuerza de la naturaleza en acción.
¡Hay que verlo!
También tienes que plantearte VUESTRA relación ¿te quedarás TIEMPO admirándolas mientras una le quita a la otra el
gusanito que acaba de desenterrar? ¿Las dejarás desembarazar de bichos el
huerto? ¿Vendrán corriendo en cuanto asomes la nariz en el jardín? ¿Comerán de
tu mano? ¿Te susurrarán coco
coco cu de esa forma
reservada SOLO
para ti?
Hay que decir que no es lo mismo ESTO que tenerlas permanentemente ENCERRADAS en un cercado de suelo bien apisonado como se han
tenido TODA LA VIDA.
Por cierto, NO necesitas UN GALLO. Las gallinas ponen HUEVOS solitas, están seleccionadas para ello.
Otra cosa es que quieras montar un criadero de
pollos de raza y necesites HUEVOS FECUNDADOS.
Pero esa es otra historia.
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